Haciendo maletas ..... otra vez

Muy organizado

 

Después de un intermezzo de viajes muy placenteros, Asturias para dejar a mis perrines, playuca, solete, Sevilla para llenarme de energías alternativas, solazo, calorazo, pueblos en transición, círculos de piedras, sueños y realidades económicas y sociales, dormir debajo de unos alcornoques, otra vez Asturias, recoger a Tanuca y Fay, playín y río, me doy cuenta que no se ha acabado la temporada de mercados aún. 

Maletita con lanas

El domingo 30 de septiembre otra vez cargar el coche para ir a Oña. Todos los años acudo, mercado simpático, me basta estar allí y pasarlo bien. 

Maletita con pendietes

 

Mercado de Artesanía y Hortalizas debajo de los plataneros. Ver a los otros mercaderes, reencuentros con amigos. Ya os contaré…

Lana Ortigada

Esta lana, recién hilada y torcida no sospechaba nada. Pensaba que le tocaba un relajante baño antes de ser colgada para secar. Pero algo le empezó a morder…..

Estas ortigas se preguntaban a qué iban a ser destinadas; una sopa bien sana, dar su sabor a una ensalada para unos veinte comensales, formar parte de una receta ecológica contra alguna plaga en la huerta al lado……

La lana y la ortiga se encontraron en la cazuela y salió un amarillo clarito, simpático.

También se ve lana teñida con cúrcuma, hojas de nogal y marrón, color natural de la oveja.

Como las Golondrinas...

De repente lo noto, todos los años lo noto. Es otro olor, otra luz, otra sensación en la piel y otro viento en el pelo: Se ha acabado el verano. Ayer fue este momento. Y como si de un mensaje se tratara, encuentro a llegar a casa, esta golondrina en el alfeizar de mi ventana.

Me llena de melancolía. Ya no irá a África o donde sea. No me despertará con su escandaloso parloteo por la mañana. Calladita y bonita se quedará aquí.

Empieza la hora de volverse para dentro, prepararse para el invierno (durillo aquí). Encender la estufita (tengo que traer la leña para casa), escribir más en el blog, recoger la casa, ordenar las  cosas (a ver si es verdad).

Bueno al final ni tan mal. Ya me he animado.

Se ha acabado el período de playas, broncearse al sol, cubatas en la terraza. Cambiemos el mundo mientras, para que vuelvan las golondrinas a un país donde hay aguas claras para todos, huertas para alimentarnos bien, gente riendo porque nos sentimos libres, como las golondrinas…..